
La Codoñera acoge la séptima Jornada QuédaTe
La iniciativa reunió a emprendedores, instituciones y ciudadanos para visibilizar las oportunidades laborales y empresariales en el entorno rural turolense.
La Codoñera fue el escenario elegido este martes 4 de junio para la celebración de una nueva edición de la jornada “QuédaTe – Oportunidades en el medio rural”, organizada por la Cámara de Comercio de Teruel en colaboración con la Diputación Provincial de Teruel. Esta iniciativa tiene como objetivo impulsar el desarrollo económico de las comarcas turolenses, fomentar el arraigo de población joven y poner en valor experiencias reales de éxito empresarial en zonas rurales.
La jornada fue inaugurada por la alcaldesa de La Codoñera, Elena Bosque, que agradeció que el municipio fuera sede del encuentro comarcal del Bajo Aragón, por su parte Rodrigo Villarroya, Director de Comercio y Desarrollo Territorial de la Cámara, quien destacó la importancia de “quedarse en nuestros pueblos, crear empleo y mostrar que es posible emprender con éxito desde el medio rural”. mientras que Antonio Abad, diputado provincial, subrayó el papel de estas jornadas en la dinamización de las diez Comarcas turolenses.
El programa comenzó con la presentación de Joaquín Lorenzo, gerente de OMEZYMA, detalló las ayudas LEADER disponibles y como se puede acceder a ellas. Sara Bianchi, técnica de la Cámara de Comercio, explicó los servicios que la institución ofrece a empresarios y trabajadores, con especial mención a los Multiservicios Rurales (MSR).
Mesa redonda: voces con nombre propio desde el medio rural
El momento más esperado de la jornada fue la mesa redonda de experiencias locales, donde seis emprendedores compartieron en primera persona su trayectoria, dificultades y aprendizajes en el camino de emprender y trabajar desde el medio rural:
- Miguel Mateo, responsable de los comercios MSR de Torrevelilla y La Cañada de Verich, destacó la importancia de ofrecer un trato cercano y personal: “A cada cliente lo atendemos como si fuera el último que entrará en la tienda”. Desde sus inicios, apostaron por ampliar servicios, incorporar tienda online y aprovechar productos de proximidad. Incluso durante la pandemia, lograron atender al pueblo puerta a puerta.
- Francisco Cortés, carpintero metálico, alertó sobre la falta de mano de obra cualificada en su sector. Explicó que ha conseguido formar a jóvenes recién salidos de FP, pero sigue teniendo dificultades para encontrar personal y está valorando atraer rabajadores de otras comunidades o países.
- Manuela Lisbona, fundadora de Mermelada Ababol, relató los obstáculos que enfrentó para iniciar su proyecto artesanal, enfrentándose a negativas y trámites burocráticos excesivos. Una empresa que ofrece Mermeladas naturales de alta calidad y con sabores innovadores.
- Carles Terès, diseñador gráfico y fundador de Terès & Antolín, explicó cómo el desarrollo tecnológico le permitió instalar su estudio en Torre de Arcas y Alcañiz, colaborando con empresas locales. Reivindicó la riqueza del trabajo en red y la confianza que se genera al trabajar desde el territorio, pese a los prejuicios iniciales que sufrió por volver del entorno urbano.
- Ricardo Lop, de Aceros de Hispania, compartió su historia de éxito en el comercio electrónico desde Castelserás, donde lleva 27 años vendiendo a más de 140 países. Subrayó que “no tenemos cartel en la puerta, pero nos encuentran desde cualquier parte del mundo”, gracias al uso inteligente de internet y redes sociales, como TikTok, donde suman más de 570.000 seguidores. “La logística es muchas veces más importante que el precio”, afirmó, defendiendo que los problemas son oportunidades: “Donde otros no llegan, llegamos nosotros”.
- Pilar, de la pastelería Makarpy, explicó cómo su familia regresó desde Zaragoza buscando paz y emprendieron con un negocio artesanal en Mas de las Matas. Próximos a la jubilación, en los próximos años, buscan un relevo generacional que continúe con una marca consolidada. Reivindicó la importancia de no dejar perder negocios viables: “Hay que tener ganas, ser autónomo y valorar el trabajo manual”.
Durante el coloquio se abordaron temas esenciales como el acceso a la vivienda para nuevos trabajadores, la burocracia administrativa, la formación profesional, y la necesidad de políticas locales que favorezcan el asentamiento de nuevos habitantes.
Todos coincidieron en que la clave para emprender en el medio rural está en la combinación de calidad, personalización del servicio, perseverancia y ganas. “El que se queda, lucha cada día, pero también recoge frutos únicos”, concluyeron.
Una de las reivindicaciones fue sobre las distintas normativas, inspecciones y burocracia vinculadas a cuestiones como sanidad, consumo o trabajo entre otras “la normativa no diferencia entre una gran empresa y una microempresa”, señalando la carga que supone cumplir con inspecciones y exigencias poco adaptadas a la realidad rural que en algunos casos son “ridículas”.
Además, se abordaron temas transversales clave para el desarrollo rural, como la vivienda. Algunos empresarios explicaron cómo están buscando soluciones activas: en Torrevelilla, el Ayuntamiento ha adquirido y rehabilitado viviendas para alquilar a nuevos trabajadores; en otros pueblos, como Torre de Arcas, la escasez de vivienda es un freno para atraer población.
El encuentro concluyó con un mensaje unánime: el medio rural tiene futuro si se apuesta por él con trabajo, ilusión y apoyo institucional. Desde la Cámara de Comercio de Teruel y la Diputación Provincial se continuará promoviendo estas jornadas a lo largo de toda la provincia para seguir generando oportunidades y esperanza en nuestros pueblos, porque tal y como afirman “quedarse es una oportunidad”