LA CÁMARA DE COMERCIO EN COLABORACIÓN CON IBERCAJA HA PRESENTADO EL INFORME ECONÓMICO DE ARAGÓN 2018, Y LA PROVINCIA DE TERUEL
Teruel, 5 Diciembre de 2019.
Sanso destaca “la fortaleza” del mercado de trabajo turolense. El catedrático subraya que el año pasado aumentó el empleo y bajó el paro.
El catedrático de Análisis Económico de la Universidad de Zaragoza Marcos Sanso considera que el mercado de trabajo en la provincia de Teruel presenta una evolución muy positiva dado que terminó 2018 con 2.300 trabajadores más y 1.800 parados menos, lo que situó la tasa de paro en el 9,16%, según la Encuesta de Población Activa (EPA). Otra de las fortalezas de la economía turolense fue el crecimiento de las exportaciones, que produjo un saldo positivo en la balanza comercial de 135 millones de euros. La principal debilidad, entre tanto, se situó en el sector de la construcción, que perdió 1.900 trabajadores y que acumuló un stock de 3.187 viviendas nuevas sin vender.
Estas fueron los aspectos destacados por el catedrático en la presentación ayer en Teruel del Informe Económico de Aragón 2018, elaborado por Ibercaja, la Fundación Basilio Paraíso y las Cámaras de Comercio.
Marcos Sanso recordó que la economía aragonesa creció un 2,5% el año pasado frente al 3,6% de 2017 y que las últimas previsiones indican que este año lo hará al 2%, todavía por encima de la media española.
Recapituló los datos de la EPA que desvelan que la provincia de Teruel terminó 2018 con 2.300 trabajadores más, lo que supone un aumento del 4,13%, y una disminución del paro de 1.800 personas, lo que situó la tasa de paro en el 9,16%, por debajo de la de Huesca (9,94%) y Zaragoza (11,61%). Y aunque la población descendió en 1.500 habitantes, la población activa se mantuvo estable, precisó.
El empleo aumentó en el sector servicios en 2.600 personas y en la industria en 1.200, mientras que disminuyó en la construcción en 1.900 y en la agricultura en 400.
Respecto a la dificultad de las empresas turolenses para encontrar trabajadores en este escenario apuntada por el presidente de la Cámara de Teruel, Antonio Santa Isabel, el catedrático indicó “con una tasa de paro tan baja, los empresarios deben competir por los candidatos”.
Añadió que es necesario “integrar” en el mercado de trabajo a las personas que acaban de terminar sus estudios y recurrir a la inmigración. De esta manera se conseguiría además incrementar la población, dijo.
“La situación actual puede ser el preludio de que la población vuelva a crecer en la provincia de Teruel, como ha ocurrido en la de Zaragoza en los dos últimos años y en la de Huesca en 2018”, según Sanso.
Por otro lado, destacó que el incremento de las exportaciones provocó que la balanza comercial terminará 2018 con un saldo positivo de 135 millones. Las ventas al exterior han continuado creciendo en 2019, sobre todo en el sector de la industria manufacturera y en concreto en el apartado de piezas de automóvil y elementos de transporte.
Explicó que aunque la provincia de Teruel es la que presenta peores datos en cuanto a la rentabilidad de las empresas y la productividad, ambos aspectos crecieron el año pasado.
La rentabilidad en concreto aumentó un 3%, mientras que la productividad se situó en 32.370 euros constantes.
Los sectores que destacan por su productividad en la provincia de Teruel (su son la metalurgia y la fabricación de productos metálicos, de maquinaria y equipo, y de muebles, así como las actividades profesionales y administrativas y las sanitarias y de servicios sociales.
Estos, junto a la industria química y el transporte y almacenamiento, son los sectores que también destacan por su productividad.
Construcción
La principal debilidad de la economía turolense se encuentra, según Marcos Sanso, en la construcción, lo que afecta también a los servicios dado que hay menos proyectos y visados y desciende el número de hipotecas, así como el importe de las mismas.
Además de la pérdida de empleo en el sector, precisó que el stock de vivienda nueva sin vender ha crecido en los dos últimos años. En su opinión, la pérdida de 1.500 habitantes está detrás del descenso de la demanda.
El presidente de la Cámara de Teruel, Antonio Santa Isabel, cifró en 3.187 el número de viviendas de nueva construcción sin vender en la provincia.
El director provincial de Ibercaja en Teruel, Jesús Beamonte, apuntó que este año la entidad ha incrementado la financiación de vivienda nueva en un 10% respecto a 2018, y que ha aumentado tanto el número de operaciones como los importes. Por el contrario, ha descendido los préstamos a actividades productivas, puntualizó.
Además, constató el incremento de los depósitos en 2018 apuntada por Sanso y dijo que la tasa de ahorro de los hogares turolenses continúa creciendo aunque no se dirige hacia los pasivos tradicionales sino hacia fondos de inversión, planes de pensiones y seguros de ahorro.
Fuente Diario de Teruel.